Un agente de la unidad contra la violencia machista de la Ertzaintza fue condenado a abonar una multa de 2.190 euros por agredir sexualmente a una víctima de violencia machista. Según informa esta sábado ‘Diario Vasco’, cuatro meses después, el policía ha sido apartado de su sección, pero sigue en la Ertzaintza y ha sido destinado a labores que no comportan atención a la ciudadanía.
El policía acudió al domicilio de la víctima, en Errenteria, al día siguiente de que la mujer pasara por dependencias policiales para hablar sobre «una orden de protección». Como consecuencia de estos hechos, al ertzaina se le ha abierto un expediente disciplinario y ha sido apartado cautelarmente de su sección y destinado a otras labores, con la prohibición expresa de desempeñar tareas que comporten atención a la ciudadanía.
El imputado reconoció los hechos antes del juicio y accedió a
compensar económicamente a su víctima, tras lo que la Fiscalía aceptó
aplicarle la atenuante de reparación del daño causado.
Según
recoge el escrito de acusación del Ministerio Público, los hechos
sucedieron en abril de 2021, cuando el citado agente tomó declaración a
la víctima «por un episodio de quebrantamiento de una orden de
protección».
El documento aclara que, «aprovechando el ejercicio de las funciones de su cargo», el día siguiente por la mañana, el hombre acudió al domicilio de la chica, situado en una localidad guipuzcoana, «con la excusa de que tenía que llevarle unos documentos».
‘Eldiario.es’ añade que «todavía no se ha decido» si expulsar al agente de la Policía de la CAV, así como que podrían suspenderlo por un máximo de dos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario