El 31 de julio de 1975 es recordado como el día más trágico para la música irlandesa. Ese día, los miembros de la entonces aclamada Miami Showband, conocidos entonces como los ‘Beatles irlandeses’ regresaban a Dublín (Irlanda) tras dar un concierto en Banbridge (Irlanda del Norte), cuando su furgoneta Volkswagen fue detenida por un grupo de hombres uniformados.
Parecía ser el típico control de carreteras tan habitual en Irlanda por aquella época, sin embargo, en realidad habían sido detenidos por miembros de la Fuerza Voluntaria del Ulster (UVF), un grupo paramilitar defensor del Reino Unido en Irlanda del Norte que aquella noche brutalmente asesinó a tres de los seis miembros de la Miami Showband: Fran O’Toole, Brian McCoy y Tony Geraghty.
Los paramilitares, que aparentaban ser soldados británicos, primero colocaron una bomba sobre la furgoneta y tras explosionar abrieron fuego contra los miembros de la banda. El cantante Frank O´Toole, el guitarrista Tony Geraghty y el trompetista Brian McCoy fueron ejecutados; mientras que el saxofonista Des Lee y el bajista Stephen Travers se salvaron. El primero logró huir del asalto y el segundo fue herido, pero logró salvarse porque pensaron que estaba muerto.
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