sábado, 27 de febrero de 2021

Diseñadores de Cosmic Tentacles, a juicio por "injurias a la autoridad"

 

Cosmic Tentacles es, además de un estudio de diseño gráfico, una iniciativa que desde hace más de cinco años lleva impulsando en la capital alavesa numerosas actividades dentro del ámbito de la cultura, incluyendo debates, exposiciones, seis ediciones del festival musical Cosmic Fest y decenas de conciertos con artistas vascos, estatales e internacionales.

Mostramos nuestra sorpresa ante la noticia recogida en El Correo Alava referente a la denuncia interpuesta contra nosotros por el departamento de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteizko Udala por la obra “All Pitufos Are Bastards”. Con ese diseño queríamos denunciar, amparándonos en el libre ejercicio de nuestra libertad de expresión, la desmesurada actuación policial del 13 de Febrero en la calle Correría, de la que hay numerosos vídeos grabados por ciudadanos que asistieron asombrados a la actitud de una Policía Municipal que no es la primera vez que se excede en el uso de una autoridad que ahora se siente injuriada.

Mientras que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos insiste en que “la libertad de expresión es aplicable incluso a aquellas que resultan opuestas, lastiman o inquietan. Así lo requieren el pluralismo, la tolerancia y el espíritu de apertura, sin los cuales no existe sociedad democrática”, vemos cómo en el Estado español se continúa persiguiendo y condenado a aquellas voces que critican las fallas del mismo. Así lo recogen informes como el de la organización internacional Freemuse (organización no gubernamental con estatus de consultora para Naciones Unidas y la Unesco), que colocan al Estado español en el liderazgo respecto a artistas encarcelados junto a “compañeros de viaje” como Irán, Turquía o Egipto.

No es de recibo que en una “democracia plena”, como así gustan de definir a algunos el régimen en el que vivimos, se quiebre el dedo que apunta y no se reflexione sobre el abismo al que señala, el del paro juvenil, la precariedad laboral, los desahucios, la obscena sumisión frente a los poderes económicos o los sistemáticos abusos de un estamento policial intocable (aunque de piel muy fina) que parece está por encima de cualquier crítica o escrutinio por parte de la ciudadanía a la que supuestamente sirve.

Los artistas, y por extensión nuestras obras, somos permeables a toda esta situación, con toda la carga de indignación y enfado que ello conlleva, y no estamos dispuestos ni a rebajar nuestro tono ni a revisar los términos en los que éstas se expresan por miedo a herir la sensibilidad de ninguna institución ni estamento público. El arte sin libertad siempre acaba encontrando vías para expresarse (a pesar del riesgo), pero ninguna sociedad que se precie de ser libre puede tener a sus artistas perseguidos, amordazados o encarcelados.

Si deciden llevarlo a los tribunales de acuerdo, nos prepararemos con todas las herramientas legales a nuestra disposición, pero también haremos uso de las que mejor nos han servido hasta ahora, la movilización en la calle y el llamamiento a la solidaridad tanto del sector artístico como del de la ciudadanía y sus organizaciones.

STOP CENSURA.


 

VANS APRESENTA: ESPECIAL RATOS DE PORÃO - 40 ANOS

Ratomaniax - Tributo Aos Ratos De Porao ( Full Album )

Ratos de Porão - No Money No English (full album)

QueenAdreena Live at the ICA full concert

Beats Antique - Beezlebub ft. Les Claypool

viernes, 26 de febrero de 2021

MAI ÉS TAN FOSC (Nunca es tan oscuro) (2014) - Èrika Sánchez

 

 

MAI ÉS TAN FOSC (Nunca es tan oscuro) Retrato del economista y activista Arcadi Oliveres. Dos años clave en una biografía apasionante:de las luchas estudiantiles contra la dictadura de Franco en los 60, pasando por los movimientos antiglobalización, la creación del Foro Social Mundial en Porto Alegre y el movimiento de los indignados (15M). Una road movie que aúna la lucha colectiva de la«Spanish Revolution» con la soledad del camino en su particular evangelio contra el capital. Del fragor de las masas de una sociedad en el abismo a la lucha individual de un hombre por superar los escollos de la condición humana.Desde hace 40 años, Arcadi Oliveres predica su combativo discurso donde quiera que se lo pidan. Le acompañamos día a día en una road movie que recorre su vida. Indignación, análisis de la realidad y coherencia blindan su discurso y le proporcionan una veracidad incontestable. Dirigida por: Èrika Sánchez Duración: 85’ Género: Documental Año: 2014 Nacionalidad: España Calificación: Apta para todos los públicos Estreno en cines: 19/09/2014 Protagonista: Arcadi Oliveres Distribuidora: Únicamente Severo Films

domingo, 21 de febrero de 2021

‘Síndrome de Sherwood’: la táctica de la Policía para justificar la represión

 

Con diferentes variantes, es una estrategia utilizada por los cuerpos policiales más represivos del mundo, y su finalidad es clara: buscar la confrontación para justificar la posterior represión y lograr dañar lo máximo posible la imagen pública de los manifestantes.

El Síndrome de Sherwood es una estrategia táctica policial desarrollada por David Piqué durante su mandato como Comisionado General de Coordinación Territorial para los Mossos d’Esquadra. Con diferentes variantes, es una estrategia utilizada por los cuerpos policiales más represivos del mundo, y su finalidad es clara: buscar la confrontación para justificar la posterior represión y lograr dañar lo máximo posible la imagen pública de los manifestantes. Para los que no lo hayan visto con sus propios ojos y sentido en sus propias carnes puede sonar conspiranoico. Nada más lejos de la realidad: el síndrome de Sherwood es la técnica que da nombre al trabajo de final de máster de David Piqué sobre políticas públicas de seguridad aplicables para acabar el fenómeno antisistema/okupa en el distrito de Gràcia, y se utiliza habitualmente. Como por ejemplo esta semana durante la manifestación en protesta por el encarcelamiento de Pablo Hasél en la céntrica Plaza de Sol el pasado miércoles, o ayer mismo en Valencia.

 

Pocas cosas dividen más a la población estos días que la condena o no a los actos vandálicos que inundan las televisiones y grandes medios de todo el Estado. Como si de ciudadanos de pleno derecho de tratara, los contenedores de basura han recibido estos días más apoyo mediático que cualquier anciano desahuciado de su hogar en el último año. No se comenta en estos medios que cada día de fuga del emérito nos cuesta a todos unos 50 contenedores. O que si los bancos devolviesen el dinero público con el que se les «rescató», cada ciudadano podría tener su propio contenedor en la puerta de su casa y un operario para vaciarlo y limpiarlo.

Cuando un movimiento social pone en tela de juicio el modelo de convivencia actual, se le criminaliza y persigue con dureza. Para intentar lograr que la población se posicione a favor de esta represión se utilizan una infinidad de recursos. Uno de los más visibles son los grandes medios de comunicación, que muestran tan sólo una parte de la realidad vivida en las calles (casualmente siempre cojean del mismo pie). Otro importante recurso es la Justicia, para la cual el término «terrorista» es un enorme saco legal en el que meter a todo aquel que difiera de la visión de modelo de estado impuesto en 1978, y sobre el que puede recaer todo el peso de la oronda justicia postfranquista de la Audiencia Nacional. Pero el recurso utilizado para criminalizar a los manifestantes del que hablamos en este artículo es el policial. Y la táctica preferida para ello tiene un poético nombre: Síndrome de Sherwood.

Este bonito término fue elegido por David Piqué i Batallé, comisario general de coordinación territorial de los Mossos d’Esquadra, y designa su trabajo final de máster sobre políticas públicas de seguridad aplicables para acabar el fenómeno antisistema/okupa en el distrito de Gràcia (Barcelona), considerado como un «factor de riesgo para la convivencia y foco potencial de percepción de inseguridad». Las técnicas que desarrolló en este trabajo de fin de Máster son utilizadas desde entonces por la Policía no solo contra los okupas, sino en cualquier manifestación que se considere subversiva desde los altos mandos. El siguiente vídeo es un buen resumen del concepto para iniciarse:

 

Por lo tanto, y como resumen introductorio, se podría decir que esta táctica busca abiertamente provocar disturbios y confrontación para criminalizar a los manifestantes. No se trata de una teoría conspiratoria, se trata de un manual de actuación, y se puede consultar aquí. Se utiliza por lo tanto a los agentes como peones de una estrategia que poco tiene que ver con el mantenimiento del orden público, exponiéndolos a sabiendas a situaciones críticas que son totalmente evitables. También se pone en peligro la integridad física de los manifestantes, de los periodistas que la cubren, y de cualquier persona que pase por el lugar equivocado en el momento equivocado. El caos para mantener el «orden».

 

 

LA TEORÍA

El texto que da origen a esta táctica policial forma parte como decimos del trabajo de de final de máster de David Piqué, y su finalidad es la criminalización del movimiento okupa y antisistema, considerado en todo momento como «problema» de orden público. El autor se posiciona en la perspectiva de la actuación policial desde una óptica represiva y «realista» (al estilo de Maquiavelo); es decir, carente de consideraciones éticas o morales. Los movimientos sociales antisistema son referidos en todo momento como «enemigos», y el texto abunda en metáforas y referencias de la historia militar para argumentar el modo de ejercer el poder policial (combinado con el político y mediático) para eliminar estos movimientos. Se trata de una forma de entender la sociedad totalmente autoritaria y donde aquellos que piensan diferente de la corriente hegemónica son considerados inmediatamente enemigos de la sociedad, sin tener en cuenta los actos que estos lleven a cabo.

La propia metáfora que da titulo al Síndrome parte de la puesta en cuestión del mito de Robin Hood, sobre el que se asume una posición de relativismo moral que se resuelve con la defensa del orden sistémico como único principio guía. Como el propio Piqué explica en la introducción:

El Síndrome de Sherwood, es una metáfora basada en las leyendas medievales inglesas de Robin Hood, donde el héroe luchaba contra la opresión y el poder establecido. Robaba a los ricos para darlo a los pobres y se refugiaba en su escondite del bosque de Sherwood. El problema estaba, como siempre, en que el héroe y su grupo, decidía quiénes eran los ricos a quien robar y los pobres a quien beneficiar.

A continuación, algunos extractos de dicho trabajo:

Incluso si la concentración o manifestación, que es lo que estamos hablando, no se prevé bastante violenta, se puede llegar a provocar un poco, con detenciones poco justificadas y nada pacíficas unos días antes para calentar el ambiente. También se pueden hacer «redadas» preventivas a los lugares donde se encuentran habitualmente personas cercanas a la ideología de los convocantes con la excusa de buscar drogas o lo que sea necesario.

La ’’redada’’ estará especialmente mal hecha y con trato humillante para encender más los ánimos, si es necesario.

La consecuencia previsible de estos comportamientos previos y el diseño del dispositivo policial, es que acabará con una «batalla campal».

Además de la estrategia previa, en cuanto algún grupo descontrolado empieza las acciones violentas, las unidades de policía ni se mueven y cuando la violencia empieza a ser generalizada, la actuación policial se retrasa deliberadamente hasta que los daños producidos son socialmente inaceptables. Es entonces cuando se producen las cargas policiales que en ningún momento quieren ser disuasoria, no se disimula.

Se va directamente contra los manifestantes, que ya son considerados vándalos, y se les ataca con suficiente velocidad para que no dé tiempo a la fuga y se provoque el enfrentamiento físico.

Lamentablemente, esta táctica no es exclusiva de regímenes totalitarios, también se da con demasiada frecuencia en muchas democracias occidentales

Se deberá procurar la detención selectiva de los líderes para imputarles delitos comunes y evitar la condición de «mártir».

4 ª fase. Ataque al corazón de Sherwood y detención o descrédito de los posibles Robin Hood. Pasado un tiempo prudencial, donde se compruebe que todos los individuos o grupos posibles se hayan acogido a las nuevas reglas del juego, es el momento de ir a por los «irreductibles» y empezar a aplicar la ley en toda su extensión. En nuestra metáfora, dar privilegios a los «institucionalizados» y empezar a cortar árboles del bosque.

 

LA PRÁCTICA

Obviamente no todos los disturbios se originan de este modo. En el desarrollo de una manifestación, y de los movimientos sociales en general, influyen numerosos factores que hacen que sea realmente complejo su estudio. Pero si se dan las circunstancias concretas y previsibles como sucedió este miércoles en la céntrica plaza de Sol, sí podemos decir que la Policía cuando menos fomenta esos disturbios con una finalidad concreta. La previsión de violencia debido a lo caldeado de los ánimos, unido a la necesidad de criminalizar la protesta y la propia localización (como muchos comentaban, la plaza es una ratonera por las pocas salidas existentes) ayudaron para tomar la decisión de poner en práctica el Síndrome de Sherwood. La técnica se desarrolla a grosso modo del siguiente modo:

1. Registro y control de manifestantes en todos los accesos. Se busca causar la sensación de miedo en los asistentes y de que la Policía tiene el control. Según el tratado de David Piqué: «La redada estará especialmente mal hecha y con trato humillante para encender más los ánimos, si es necesario».

 

 

2. Se impide la salida de la Plaza. De este modo se comienza a caldear el ambiente y se mantiene a todos los manifestantes juntos para facilitar el posterior aporreamiento. «La consecuencia previsible de estos comportamientos previos y el diseño del dispositivo policial, es que acabará con una «batalla campal»».

 

3. Se producen duras y rápidas cargas policiales, lo más injustas e indiscriminadas posibles para caldear al máximo el ambiente. No se busca en ningún momento mantener el orden o desalojar la plaza, sino aumentar la tensión: «Se producen las cargas policiales que en ningún momento quieren ser disuasorias, no se disimula. Se va directamente contra los manifestantes, considerados vándalos, y se ataca con suficiente velocidad para que no dé tiempo a la fuga y se provoque el enfrentamiento físico».

 

 

4. Comienzan los disturbios, dejando un tiempo prudencial para que se desarrollen de modo más violento: «En cuanto algún grupo descontrolado empieza las acciones violentas, las unidades de policía ni se mueven y cuando la violencia empieza a ser generalizada, la actuación policial se retrasa deliberadamente hasta que los daños producidos son socialmente inaceptables«.

 

 

5. Ya tenemos la batalla campal y los disturbios necesarios para que los medios de comunicación «hagan su trabajo». Las cargas son lo más brutales e indiscriminadas posibles, puesto que se lucha contra peligrosos enemigos de la sociedad: «En este estadio, los manifestantes atacan a la policía con todo lo que tienen y que les ha dejado tener, realmente se están defendiendo, pero no lo parece. Han sido acorralados. La violencia entre agentes y manifestantes se desata, se personaliza y se descontrola. Es lo que se quiere. Comienzan a aparecer víctimas inocentes – daños colaterales se dice ahora- Los que han rehuido el enfrentamiento, se encuentran con el resto de unidades policiales que los cierran el paso y que no hacen detenidos – prisioneros-, la dispersión no es voluntaria , es a golpe de defensa (porra) y cualquier atisbo de resistencia es contestada con contundencia exagerada y detenciones masivas«. Se procede también a realizar dichas detenciones, teniendo especial cuidado en no crear mártires como Hasél: «Se deberá procurar la detención selectiva de los líderes para imputarles delitos comunes y evitar la condición de mártir».

 

 

Ayer mismo en Valencia se pudo observar un modo de actuación similar. Desde el inicio de la marcha un helicóptero policial sobrevolaba la zona y un total de 16 furgones policiales hacían acto de presencia en la Plaza de San Agustín, repartiéndose por las vías cercanas para controlar a los diferentes grupos aislados. La mayoría de los participantes que se trasladaron a diferentes puntos han acabado controlados de nuevo en la Plaza del Ayuntamiento. La marcha llegó hasta las inmediaciones del edificio de la jefatura de la Policía y, una vez allí, la policía lanzó varias salvas y cargó contra los manifestantes que, como puede verse en el vídeo, marchaban pacíficamente:

 

Obviamente quien más sufre con esta forma de actuar es la democracia. Directamente, son los manifestantes los que padecen mayores consecuencias, tanto físicas como psicológicas. En ocasiones incluso son los propios agentes quienes soportan las consecuencias de esta deleznable práctica:

 

 

La consigna es clara: estamos en una guerra entre nosotros (los buenos) y aquellos que quieren cambiar el modelo de convivencia social (los malos). Da igual quien sea y cómo busque ese cambio. Lo importante es mantener las cosas tal y como están, a cualquier precio. Las siguientes palabras pronunciadas por el propio creador del Síndrome de Sherwood durante un discurso muestran claramente la locura que envuelve a ciertos sectores de nuestra sociedad, sirviendo como perfecto resumen de la ideología de quien pone en práctica este tipo de estrategias:

Les iremos a buscar, ya se pueden esconder donde quieran porque les buscaremos, sea en una cueva o en una alcantarilla que es donde se esconden las ratas. Tampoco les servirá esconderse detrás de unas siglas, o una asociación, o una capucha, o de una revista, o de una asamblea que no representa a nadie o incluso detrás de una silla de la universidad. No vale poner el objetivo social a cualquier actividad para justificar saltarse la norma – David Piqué, ex comisario general de coordinación territorial de los Mossos d’Esquadra y creador del Síndrome de Sherwood.

Fuentes: SantafeAndres_ //  lavanguardia.com // elespanol.com // 15mpedia.org // spanishrevolution.net

 


Fuente: Eulixe

 

https://kaosenlared.net/sindrome-de-sherwood-la-tactica-de-la-policia-para-justificar-la-represion/ 

miércoles, 17 de febrero de 2021

Unai Romano, XXI. mendeko torturaren aurpegia

 

Hace casi 20 años, el 6 de septeimbre de 2001, la Guardia Civil arrestó al vitoriano Unai Romano. Las torturas sufridas durante la incomunicación le produjeron graves lesiones, y la fotografía que le hicieron al entrar en prisión pusieron en evidencia que en el siglo XXI se seguía torturando en España. 

5º capítulo de la webserie Galdutako Objektuak realizada con el material extra de la película "Non dago Mikel?" (www.mikelzabalza.eus). 

Puedes ver todos los capítulos en https://www.youtube.com/playlist?list... .

El discurso de Gabriel Rufián para enmarcar: ARREMETE conta TODOS

La contundente réplica de Oskar Matute contra el PP por la okupación

martes, 16 de febrero de 2021

"Tenemos que recuperar la Ertzaintza" Arnaldo Otegi


Feminista, cooperativista, distribuido y orientado al procomún: bienvenidas a DisCO

Homenaje a la División Azul concluye con el saludo nazi (Madrid 2021)

 


Hasél - Poeta Proscrito (2021)

 

El documental 'Hasél- Poeta Proscrito' narra la historia del artista y militante comunista Pablo Hasél, condenado a penas de prisión en dos ocasiones por el contenido revolucionario de sus canciones y poemas. Será el primer rapero encarcelado en Europa y un ejemplo en la lucha por la libertad de expresión. 

Una producción independiente de MAOMAO, cine militante y partidista. 

 Escrita y dirigida por Nikone Cons. 

Este trabajo, militante y solidario, lo hemos realizado de forma independiente para denunciar la injusticia y represión que sufre Pablo. 

Si alguien quiere hacer alguna aportación económica puede hacerlo a la caja de resistencia de nuestro compañero. 

 Número de cuenta solidaria: ES 15 2100 3611 5021 0021 0784 

PayPal: llibertatpablohasel@gmail.com

https://www.naranjasdehiroshima.com/2021/02/hasel-poeta-proscrito.html 

 

lunes, 15 de febrero de 2021

La Tragedia de Pikoketa

El 28 de julio de 1936 el último reducto que apoya el alzamiento en Donostia, los cuarteles de Loyola, capitula. Las columnas de voluntarios navarros que acuden a auxiliar a la guarnición sitiada deben replantearse la situación y derivar todos sus esfuerzos a la toma de Irún y al cierre de la frontera con Francia.

El coronel Alfonso Beorlegui se encuentra con que el puente de Endarlatza ha sido volado por los republicanos. Decide entonces tomar otra ruta y rodear las peñas de Aia, que supone ocupadas por el enemigo, a través del paso de Arritxulegi para caer sobre Oiartzun. En esta población es detenida la progresión de su columna el día 21 de julio llegando a ser comprometida su situación. No obstante el 26 recibe refuerzos avanzando hasta las afueras de Errentería, concretamente en el barrio de Ugaldetxo, lugar donde milicianos y fuerzas del orden presentan una dura resistencia. La Columna de Beorlegui se ve obligada a detenerse en Oiartzun y hacerse fuertes allí en espera de mejores oportunidades.

Milicianos en Alegia (Gipuzkoa) (Fondo Marín-Kutxa Fototeka.jpg)

Se conforma de este modo una línea defensiva para hacer frente a las columnas navarras, que apoyándose en el Endarlaza por un lado y continuando por las alturas de Pagogaña, Erlaitz, Peñas de Aia y el monte Pikoketa. Desde las alturas, sobre todo de Erlaitz, Peñas de Aia y Pikoketa; se hostiga de manera continua la línea de abastecimiento de la columna del coronel Beorlegui y el suministro a la tropa consecuentemente se ve afectado. Un problema que preocupa sobremanera a la oficialidad sublevada. El 7 de agosto el teniente coronel José Solchaga toma una decisión. El continuo hostigamiento del que es objeto su línea de suministros le conduce a elaborar un plan con el que emprender su eliminación.

El 11 de agosto La Columna Los Arcos se pone en marcha desde el caserío Ergoyen. El Pikoketa es guarnecido por escasa tropa compuesta por milicianos, entre las que hay dos mujeres, y carabineros. Son 20 combatientes. En su mayoría jóvenes comunistas de Irún. Disponen una ametralladora en el interior de un caserío y además cuentan con un cañón de 70MM. Todavía no ha amanecido. Llueve y una densa niebla parece querer engullir el paisaje. La aproximación del enemigo pasa desapercibida para los jóvenes milicianos. La inexperiencia en estas lides invita a la relajación y evita que tomen las medidas de vigilancia pertinentes en este tipo de situaciones. Todos se refugian de las malas condiciones climatológicas en el caserío. Craso error.

Los atacantes se aproximan en silencio a la posición. Tienen tiempo suficiente para desplegarse y realizar los movimientos ordenados con toda tranquilidad. Los descubren cuando es ya demasiado tarde. Tras la sorpresa inicial unos pocos milicianos consiguen huir, otro consigue ocultarse entre unos matorrales, se trata de Alejandro Colinas (Usabiaga-Rodríguez, 2006). Será testigo del horror que a continuación va a golpear a sus compañeros.

Requetés del Tercio de San Miguel en Gipuzkoa. (Fotografía en http://premindeiruna.blogspot.com)

Arrancada del interior del caserío la guarnición es pasada por las armas. Las dos milicianas violadas y torturadas cortándoseles los pechos (Jiménez Aberasturi, 2003). Posteriormente entierran los cuerpos en una fosa común.

Aquellos jóvenes eran los siguientes:

  • Mercedes López Cotarelo. 16 años. Juventud Comunista de Irún.
  • Pilar Valles Vicuña. 18 años. Juventud Comunista de Irún.
  • José María Arruti Idiaquez. 18 años. Juventud Comunista de Irún.
  • Víctor Genua Montiano. 25 años.
  • Jesús López Casado. 26 años. Partido Comunista.
  • Agapito Domínguez Taguada. 23 años. Juventud Comunista de Irún.
  • Bernardo Usabiaga Jauregui. 17 años. Juventud Comunista de Irún y sindicado en la FUE (Federación Universitaria Escolar).
  • Manuel Justo Alberti. 22 años.
  • Miguel Jacinto López. 39 años. Carabinero natural de Huete (Cuenca).
  • Vicente Argote. 40 años. Carabinero.
  • Agustín Miguel Bermejo. 39 años. Carabinero nacido en Zugarramurdi (Navarra).
  • Félix Luz Echevería. 27 años. Carabinero.
  • Ángel Braña López.

Los lamentables hechos de Pikoketa acaecidos el 11 de agosto de 1936, constituyen tal vez uno de los episodios más duros y dramáticos de la guerra en Guipúzcoa.

Fuentes

  • Barruso Barés, Pedro. Verano y Revolución. La Guerra Civil en Guipúzcoa.
    Donostia, 1996.
  • Gorriti, Iban. “Flores de la República” fusiladas en Pikoketa. En Deia: Historias de los Vascos, 2015.
  • Jiménez de Aberasturi, J.C.; Luis Mª. Crónica de la Guerra en el Norte (1936-1937). San Sebastián, 2003.
  • Martínez Bande, José Manuel. Nueve meses de guerra en el norte. En Monografías de la guerra de España, nº4. Madrid, 1980.
  • Usabiaga, Marcelo; Rodríguez Álvarez, Mikel (entrevistador). La Batalla de Irún. En Historia 16, Nº 362, Madrid, 2006.
  • Usabiaga, Miguel. Pikoketa, 80 años. Deia, 27/08/2016.
  • http://www.asociacionrepublicanairunesa.org

https://elgajedeloficio.wordpress.com/2018/06/14/la-tragedia-de-pikoketa/ 

 

lunes, 8 de febrero de 2021

Anatomía de un caso de impunidad policial


 

Casi siete años después de la agresión policial a varios fotoperiodistas en la protesta Jaque al rey de 2014, el único condenado ha sido el Ministerio del Interior, que tuvo que pagar 1.771,45 euros. La Justicia ha sobreseído la última denuncia contra uno de los agentes por «falso testimonio» y «denuncia falsa».

Era sábado, 29 de marzo de 2014, y se celebraba la manifestación Jaque al rey. La semana había sido movida. Apenas una semana atrás se habían celebrado en Madrid las Marchas de la Dignidad, que acabó en violentos disturbios y un joven perdió un testículo por culpa de una pelota de goma lanzada por la Unidad de Intervención Policial (UIP). Solo dos días antes, además, la escuela pública había celebrado una multitudinaria manifestación durante una jornada de huelga y varios sindicatos policiales habían sido cazados difundiendo pruebas falsas para criminalizar a los detenidos en las Marchas de la Dignidad.

En este contexto se llegó a la manifestación de Jaque al rey, que debido a la lluvia fue un relativo fracaso. Sin embargo, al término de la misma se produjo el incidente que durante casi siete años se ha paseado por juzgados y audiencias y que estas semanas está dando uno de sus últimos coletazos en los tribunales. El periodista y activista conocido entonces como Boro LH (Jorge Correa), ahora en proceso de transición de género a Edurne Correa, está intentando en los tribunales que se juzgue por denuncia falsa y falso testimonio al agente de Policía que en 2014 le denunció por, supuestamente, darle una patada en la rodilla izquierda causándole una grave lesión.

El agente de Policía ratificó su denuncia en sede judicial y la Fiscalía solicitó seis años de prisión para (entonces) Boro LH, hoy Edurne. Sin embargo, tras un proceso judicial de cinco años, en enero de 2019, los tribunales fallaron la absolución de Edurne. La multitud de vídeos que se hicieron públicos de aquel «incidente», tal y como lo llamó la Justicia, mostraba la carrera de Edurne tras un amago de encararse con un agente y, después, los golpes de los agentes a los fotorreporteros que documentaban la persecución. Ningún vídeo, ninguna imagen acreditó la versión policial de que Edurne hubiera agredido a alguno de los agentes.

Así, la Justicia sentenció la absolución de Edurne al entender que las versiones de los agentes de Policía eran «poco precisas» y «no uniformes entre sí en cuanto a la sucesión y alcance de los hechos». Exactamente, la sentencia señalaba lo siguiente: «Existen declaraciones poco precisas, no uniformes entre sí, de los agentes en cuanto a la sucesión y alcance de los hechos, no corroboradas realmente por sus compañeros, presentando los agentes lesiones con diferentes mecanismos de producción. Lo expuesto hace que surjan dudas para estimar que la prueba de cargo sea suficiente para desvirtuar la presunción de inocencia, y dichas dudas se generan aún más con el visionado realizado en el plenario del vídeo«.

Tras esta sentencia absolutoria y tras los cinco años vividos con una petición de cárcel de seis años, Edurne Correa decidió acudir a los tribunales para interponer una querella contra el agente que le había denunciado por los delitos de falso testimonio y denuncia falsa. Sin embargo, el Juzgado de Instrucción nº 39 de Madrid declaró el sobreseimiento provisional y archivo de las diligencias porque «el hecho de que existan contradicciones (…) no implica la existencia de los delitos de denuncia falsa y falso testimonio». «No es suficiente para ello que existan contradicciones en la declaración prestada sino que ha de faltarse a la verdad de forma que pueda calificarse como falso el contenido de la denuncia o la declaración vertida en el acto del juicio», sentencia.

Los fotoperiodistas buscan justicia

Mientras avanzaba la causa judicial contra Edurne y la Fiscalía solicitaba seis años de prisión, en paralelo, diferentes juzgados y tribunales iban cerrando las puertas a las acciones judiciales emprendidas por Legal Sol, concretamente por el abogado Eric Sanz de Bremond, y los fotoperiodistas agredidos para que los agentes de Policía respondieran ante la Justicia por su intervención. La propia OSCE, en un comunicado calificó de «inaceptables» las agresiones policiales. Sin embargo, nada funcionó.

No constituyó un atentado contra la libertad de prensa

La defensa de los reporteros denunció, además, que existían indicios más que suficientes para que se investigase si la agresión de los policías buscaba impedir y dificultar el ejercicio del derecho a la información, por lo que las agresiones también podrían constituir un atentado contra el derecho a la libertad de información.

Sin embargo, casi un año después de la reclamación de los reporteros, la Audiencia Provincial de Madrid desestimó que la agresión constituyera un atentado con la libertad de información, ya que no existían «indicios de que el agente imputado pretendiera impedir el ejercicio de la libertad informativa de los periodistas presentes». El auto argumentó que la situación era muy confusa, los hechos sucedieron muy rápido y los policías no podían saber que las personas golpeadas eran periodistas, ya que estos no lo hicieron saber.

Así, la Justicia entendió que no se había vulnerado el derecho a la información ya que tampoco se habían intervenido los equipos y cámaras de los periodistas y que estos tampoco habían aludido a su condición de informadores durante los golpes, pese a ir correctamente identificados como prensa.

La falta de lesiones, prescrita

La Audiencia Provincial tardó ocho meses en tramitar este recurso y su negativa a calificarlo como un atentado contra la libertad de información provocó que la única vía posible para llegar a los juzgados fuera a través de un juicio de faltas por lesiones y daños. Sin embargo, el retraso en la tramitación también provocó que la falta de lesiones hubiera prescrito. Se llegó a celebrar un juicio en el Juzgado de Instrucción nº 46 de Madrid donde la sentencia reconocía la agresión a los periodistas. Pero la falta estaba prescrita y, por lo tanto, quedaba impune. En aquel juicio, la Policía, que no había logrado identificar a los agentes tiempo atrás, sí logró encontrar identificarlos para que participaran como testigos en defensa del único agente que había sido imputado.

La agresión a varios periodistas, que había sido reconocida por el Juzgado de Instrucción nº 46 de Madrid mediante sentencia, quedaba impune.

Razones para la impunidad

El retraso de la Audiencia Provincial a la hora de resolver el recurso de los fotógrafos fue solo uno de los múltiples factores que permitió que la agresión policial quedara impune. El primero de todos ellos es que los agentes de Policía Nacional que agredieron a los periodistas iban sin identificar. No llevaban, tal y como dicta el reglamento, su número de placa visible en la parte trasera del chaleco antibalas.

El segundo factor fue la ausencia total de colaboración por parte de los mandos de la Policía Nacional para identificar a los agentes responsables de la agresión. Tras la presentación de la denuncia por parte de los fotógrafos, el Juzgado de Instrucción nº 46 de Madrid requirió al jefe de la 1ª Unidad de Intervención Policial que reconociera a los agentes implicados. La respuesta del mando policial fue que no tenía constancia ni conocimiento de agresión alguna y la jueza decidió archivar la causa.

En este punto del proceso es cuando se dio el último de los factores que ha permitido la impunidad de la agresión. El juzgado de instrucción tardó seis meses en procesar el recurso y la Audiencia Provincial había tardado otros ocho meses en pronunciarse, por lo que la agresión había quedado prescrita.

¿Solución? Paga el Estado

El equipo jurídico de Legal Sol continuó batallando en los tribunales para que el caso no cayera en la total impunidad. Su último intento fue realizar una reclamación patrimonial al Ministerio del Interior, que no contestó a la petición. Entonces decidió acudir al Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo nº 6 de la Audiencia Nacional para interponer una demanda contra el Estado por responsabilidad patrimonial. Y aquí fue donde los fotorreporteros obtuvieron su única victoria.

El Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo nº 6 de la Audiencia Nacional, finalmente, condenó al Ministerio del Interior a indemnizar a uno de los reporteros agredidos con 1.771,45 euros más intereses y costas al considerar que existió «una responsabilidad del Estado por el mal funcionamiento de la Administración, en este caso, por el comportamiento indebido de sus funcionarios que produjo daños a un periodista que se encontraba trabajando y que no pudo ser indemnizado en vía penal debido al retraso de la tramitación del proceso penal causado por la propia Administración de Justicia».

La Justicia reconocía de esta manera dos puntos. Por un lado, el «comportamiento indebido» de, al menos, uno de los agentes de Policía. Un comportamiento indebido que no tuvo ninguna consecuencia para él. Por otro lado, que la vía penal se cerró para los denunciantes debido a un «retraso» achacable únicamente a la propia Administración de Justicia. Así, casi siete años después de la agresión de agentes de Policía a varios fotoperiodistas, el único condenado por este asunto ha sido el Ministerio del Interior y la sanción a pagar sale de dinero público. 

https://www.publico.es/sociedad/jaque-rey-anatomia-caso-impunidad-policial.html

Denuncian que la Ertzaintza ha entrado «sin autorización y con impunidad» en El Infierno

 

A través de las redes sociales, vecinos del barrio ocupado de El Infierno han denunciado que la Ertzaintza ha irrumpido esta mañana la zona. «Hacia las 8.00 de la mañana, han aparecido dos furgonetas y un coche de la Ertzaintza en la puerta del edificio, los agentes han entrado en el barrio sin ningún tipo de autorización y con toda impunidad (rompiendo puertas, entrando en las habitaciones de la gente que estaba dormida)», han explicado.

Al parecer, no han aclarado el motivo de su actuación y han dado explicaciones diferentes a cada vecino. A algunos de ellos, a quienes entendían mejor la lengua, les han dicho «que se va a producir un desalojo en un futuro cercano». «Es decir, han aprovechado el grado de vulnerabilidad de cada uno para desarrollar diferentes estrategias de manipulación y con ello han tratado de desestructurar el grupo».

Mientras algunos agentes realizaban labores de identificación, «otros agentes han realizado distintas pintadas en los pasillos del edificio. En las pintadas han puesto ‘Ertzaina herria zurekin’ y ‘Gora Ertzaina’ con el objetivo de utilizar técnicas de humillación y miedo», han criticado.

Ante lo ocurrido, los vecinos del Infierno han manifestado que «vivimos en una casa okupada y que acceder a nuestras casas implica una vulneración de nuestra intimidad que está fuera de todo derecho». Finalmente, han reiterado que seguirán respondiendo «de forma autónoma a la problemática de la vivienda en la Donostia diseñada para los turistas».

 https://www.naiz.eus/eu/info/noticia/20210206/denuncian-que-la-ertzaintza-ha-entrado-sin-autorizacion-y-con-total-impunidad-en-el-infierno

domingo, 7 de febrero de 2021

Ocupación S.A. [Documental]


Ocupación S.A. es el retrato de una traición. Con un enfoque minucioso e inédito, el documental expone los nombres y apellidos de los empresarios y políticos españoles involucrados en la explotación económica del Sáhara Occidental, la última colonia de África y uno de los territorios más violentos, militarizados y censurados del mundo.
 

 Los testimonios recogidos en este documental también revelan la cadena de silencios y mentiras que empieza en los centros de poder europeos y termina en las ciudades ocupadas por Marruecos, donde hombres y mujeres saharauis resisten al despojo y a la negación de sus derechos.

http://ahotsa.info/edukia/ocupacion-sa 


Ocupación S.A. [Documental] from Mundubat on Vimeo.


EL DROGAS (Documental)

El Drogas es un documental biográfico que explora, como si de un río se tratase, todas las dimensiones y vertientes de la figura de Enrique Villarreal, exvocalista, bajista y líder de la banda de rock Barricada. Un retrato humano donde la memoria individual confluye con la colectiva ofreciéndonos un relato que profundiza en el recorrido histórico y vital de una de las figuras más importantes del Rock & Roll en castellano. Una historia emocional donde podremos observar los diferentes rostros y caminos que este singular artista ha tomado. Es esta la historia de un ser que camina torcido para poder ver lo que hay al otro lado. Esta es la historia de Enrique Villarreal El Drogas.

MAN 2020 Steve Cutts

miércoles, 3 de febrero de 2021

La caja B del PP se usó para intentar culpar a ETA del 11-M a través de Jimenez Losantos

 


El escrito de Luis Bárcenas a la Fiscalía Anticorrupción afirma que la compra de acciones con dinero de la caja B del PP de un medio de Jiménez Losantos se llevó a cabo «especialmente» porque alimentaba la teoría de la conspiración de que ETA estaba detrás del 11-M.  

El Partido Popular compró acciones de Libertad Digital por valor de 140.000 euros con dinero que provenía de su caja B, según afirma el extesorero del PP, Luis Bárcenas, en el escrito remitido a la Fiscalía Anticorrupción con el que muestra su intención de colaborar, después dee que el PP no cumpliera su parte del trato de mantener fuera de la cárcel a su esposa, Rosalía Castro. 

La compra de estas acciones se efectuó «por razón de que este medio de comunicación resultaba afín a las ideas del Partido Popular y, especialmente, a las tesis de la autoría de ETA en los atentados del 11M que tuvieron lugar unos meses antes de la suscripción de estas acciones», según señala el escrito. 

El escrito recoge que la compra de acciones fue a finales de 2004 y se hizo a nombre de Lapuerta. Los 140.000 euros salieron directamente de la caja fuerte que tenía Bárcenas en su despacho, la misma de la que salían los sobres para pagar «complementos salariales» a varios líderes del PP, entre ellos, el expresidente navarro Jaime Ignacio del Burgo.

Precisamente, Del Burgo ha negado haber recibido un sobresueldo del PP, en un comunicado en el que ha señalado que «nunca, jamás, percibí un sobresueldo del Partido Popular. Nunca, jamás, ni don Álvaro Lapuerta (que fue tesorero del partido) ni él mismo (Bárcenas) me entregó cantidad alguna en concepto de sobresueldo».

Así lo sostiene en la nota en la que admite que hizo de intermediario para entregar dinero a varios cargos, pero negando que fuera dinero opaco o que procediera de la 'caja B'.

 https://www.naiz.eus/eu/info/noticia/20210203/la-caja-b-del-pp-se-uso-para-intentar-culpar-a-eta-del-11-m